Cuatro días en Andorra dan para mucho. Partiendo desde El Tarter se puede alcanzar una de las cotas esquiables más altas de Andorra, La Llosada. Y vive Dios, que la subida es fuerte.
Llegué con una temperatura general bastante fría, en cotas altas tenía máximas de 5 grados bajo cero. Lo que quiere decir que la nieve ha estado muy bien los cuatro días, incluso en cotas bajas.
Todos los días me he dedicado por la mañana al esquí de travesía hasta las doce más o menos y luego al esquí alpino. Tengo que reconocer que las botas Escarpa, las fijaciones Dinafit y las tablas ligeras son todo un acierto por lo cómodas y multifuncionales en ascensos y descensos.
Por primera vez desde que esquío, meterme por las pistas negras no ha supuesto ni siquiera motivo de comentario. Cualquier rincón de las estaciones de Gran Valira era apto para esquiar.
De las trazadas de la travesía no quiero hacer ningún comentario......Todas la fotos están en PICASA
Ahora sólo queda que antes de que acabe la temporada caigan un par de buenas nevadas para que me den margen a hacer algua subidita más. ¡Me he quedado con ganas!
